Hoy en día ya nadie se cuestiona la necesidad de disponer de una marca personal potente en Internet, sobre todo de cara al mercado laboral, se trabaje por cuenta ajena, por cuenta propia o también (y sobre todo) si se está en proceso de búsqueda de empleo. Empleadores, clientes, inversores, posibles socios van a rastrearnos por internet para conocernos más a fondo ya que van a poder obtener una información mucho más enriquecida que la que da un simple C.V. tradicional.
La buena noticia es que tenemos muy buenas herramientas para poder controlar en gran medida y potenciar nuestra marca personal en internet, redes sociales, blogs, webs, etc nos van a permitir modelarla, pero antes de lanzarnos a darnos de alta en todos estas herramientas debemos hacernos tres preguntas básicas.
- ¿Quién soy?
- ¿Qué hago?
- ¿A quién le importa
Tenemos que conocernos muy bien, saber cuáles son nuestras puntos fuertes, los débiles y las potencialidades que tenemos para poder diseñar nuestra propia estrategia de marca personal en la red, hacer nuestro DAFO personal.
Ahora vamos a construir nuestra marca personal, de nuevo tenemos que plantearnos una serie de cuestiones antes de ponernos a realizar acciones que puedan ser inconexas, incoherentes entre sí o todavía peor contraria a nuestros objetivos, algunas de estas cuestiones podrían ser:
- Debemos basar la en la autenticidad.
- Tenemos que alinear, quienes somos, en qué trabajamos y qué hacemos.
- Tener claro qué es lo que nos hace excepcional.
- ¿sabemos por qué me compran o no me compran?
Analizar estas cuestiones nos va a permitir sobresalir, destacar es decir encontrar propuestas de valor que nos permitan diferenciarnos del resto, hay que tener en cuenta que actualmente hay una saturación de la oferta, no sólo de productos sino también de personas y profesionales y una sobrecualificación de los mismos que nos obliga a destacar de algún modo.
Para lograrlo nos tenemos que basar en tres premisas: Especializar, es decir, encontrar el nicho de mercado e intentar ser muy bueno en eso, contarlo porque aunque seamos buenos, si no lo sabemos comunicar no nos sirve de nada y por último potenciar nuestra marca para lograr un prestigio y reconocimiento.
Esto nos permitirá captar la atención de las personas que nos interesan, ya sean empleadores, clientes, proveedores, etc. ahora hay que devolverle la confianza que ha depositado en nosotros, ¿cómo? pues debemos aportar algo de valor, contenidos que tengan simplicidad, transparencia y cercanía
Por ello tenemos que tener claro cuál es el objetivo de la marca para nuestra estrategia en internet que se deben basar en cuatro fases, atraer visitantes, convertir visitas en acciones que nos interesan (ventas, entrevistas, visitas, peticiones de información, etc.), retener y fidelizar y por último medir, ya se sabe que lo que no se puede medir no existe.
Consejos básicos y fáciles de seguir para crear una imagen personal en internet potente, algo imprescindible a día de hoy.